La importancia de la buena educación
Enseñar a tus hijos e hijas el respeto, la empatía y el rechazo a cualquier tipo de explotación y discriminación es el camino a una mejor sociedad.
No podemos delegar aspectos de la educación a otras esferas alejadas del hogar.
Desarrollar en las personas menores hábitos sanos, de empatía, y no violentos, que se valoren como aspectos básicos de vida es muy importante.
Por consecuencia de lo anterior deberíamos también inculcar hábitos alimenticios sanos, para evitar procesos patológicos desde su raíz, como las enfermedades cardiovasculares, aterosclerosis, niveles elevados de colesterol e hipertensión arterial, y conductas que podrían derivar en enfermedades, como la ingesta calórica excesiva, el sedentarismo, y otros malos hábitos que las personas jóvenes pueden considerar correctas sin una buena formación.
Al enseñar a las personas más jóvenes empatía y buenos hábitos también les enseñamos autocuidado y autoestima, cuando una persona se ama a sí misma, es más fácil que sea una persona feliz, una persona feliz rechazará cualquier tipo de comportamiento violento con ella misma y con los demás humanos y no-humanos en la mayoría de los casos.
Tendremos personas que rechacen cualquier tipo de comportamiento violento, y costumbres no saludables que impidan la adquisición de un bienestar físico y mental, y ayudarán a cumplir el objetivo de “vivir más, vivir mejor en sociedad, y ayudar a los más necesitados”.
Recuerde: Educar a los niños y niñas desde temprana edad, es la medida preventiva más eficaz para ser mejores personas, evita conductas violentas a lo largo de toda la vida del individuo y mejora su salud. Nunca será tarde para instruir; enseña correctamente, es muy probable que no lo olviden en el futuro y por favor no eduque desde el especismo; rechácelo.